Hoy se nos marcha Esther a Barna, tras un año de deliveración ha decidido dar un paso importante y valiente y se marcha a vivir a Barcelona.
Hará medio año que me enteré de la noticia y si soy sincero no creía que este día llegara, lo veía como algo lejano y un sueño de esos nunca se terminan de cumplir, bien por trabajo, estudios o simplemente porque se desea y no se quiere.
Desear implica anhelo o aspiración de que algo ocurra, querer implica voluntad y determinación porque algo suceda.
En este caso Esther lo ha querido con fuerzas.
Pero no me voy a poner melancólico, no me gustaría que esto fuera una despedida triste, porque en realidad no lo es. No se nos muere ni la ha sucedido ninguna desgracia; existe internet desde donde podremos contarla nuestras cosas y ella se podrá desahogar con nosotros, tenemos cámaras de fotos, webcams y sobre todo aviones, coches y buses.
Además tenemos ejemplos cercanos como el de Carmelo, el de Esti y el de Marta que siempre terminan de vuelta.
Vamos, que no será por ocasiones. Estamos en el siglo XXI y si la globalización es un problema también puede ser una solución. Todo el mundo está comunicado y cada vez tenemos más locutorios en las ciudades.
Así que te vas pero te 'veremos'. Como dijo Terminator: Volveré.
Lo único que la podemos desear desde aquí es suerte, suerte en tu aventura catalana y ya nos contarás historias de supervivencia sin la ayuda de los padres y anécdotas sobre convivencia!
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1 comentarios:
Yo espero que esté muy feliz por allí, y que sepa que en breves habrá que ir a hacerle una visitilla jiji
Espero que luche mucho y crezca, nosotros estaremos aquí.
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